26/4/2023
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Los contracargos pueden generar grandes pérdidas a los negocios digitales. Por ello es fundamental conocer cómo funcionan y prevenirlos en tus transacciones. La mejor forma es contar con herramientas antifraudes.
Aquí te entregamos una guía para proteger los ingresos de tu empresa y evitar estas molestas incidencias. Además, te comentamos cómo te ayuda en este objetivo una plataforma que detecte fraudes.
Los contracargos o chargebacks consisten en débitos que se hacen a un comercio ante un pago que ya ha sido realizado. Esto ocurre por diferentes razones y son efectuados a solicitud del banco emisor de una tarjeta de crédito o del cliente.
Un chargebacks implica que el dinero que ya ha sido pagado es retirado por el banco de la cuenta de tu negocio. Lo que, por lo general, ocurre cuando ya se ha entregado la mercancía o efectuado el servicio.
En consecuencia, puede implicar una pérdida financiera para tu empresa. Esto afecta de manera dramática a las startups y pequeñas empresas. Por ello, te conviene conocer sus causas y medidas de prevención efectivas.
Los bancos que emiten tarjetas de crédito protegen a tus clientes. En consecuencia, tienen políticas que les permiten reversar una operación cuando esta es cuestionada por el comprador.
Los contracargos implican pérdidas para los negocios por reclamaciones relacionadas con compras ya efectuadas y mercancías ya entregadas.
Las razones por las que los contracargos ocurren son varias. Un cargo puede ser objetado porque el cliente no está satisfecho con el producto que recibió. Esto puede deberse a que se le entregó el producto equivocado o se encuentra en malas condiciones.
Otra razón es que la misma compra fue cargada en varias ocasiones. También puede ocurrir que el cliente no reconozca haber realizado la compra. En ese caso, se comunica con el banco y solicita el contracargo.
Por otro lado, si la compra se realiza con una tarjeta robada o clonada también se producirá un contracargo. El tema detrás de esto es que el dinero será recuperado por el banco, pero debitado de tu cuenta.
Aunque la definición de los contracargos es sencilla, el proceso que involucran es mucho más grande. Forma parte de un complejo ecosistema de pago. Veamos cuáles son las partes implicadas:
Una vez que el cliente ha efectuado la solicitud del chargeback, la empresa puede presentar un reclamo. De esa forma puede detener el reverso mientras presenta la documentación correspondiente.
Según cifras de Condusef, en el primer trimestre de 2022 se produjeron en México 891.683 contracargos que representa el 0,41% de las compras autorizadas.
Su tarea es mostrar que la transacción realizada fue procesada de forma correcta. En tal sentido, es fundamental atender a los tiempos, ya que los reclamos deben ser realizados dentro de los 30 días siguientes a la operación.
Al detallar las fases de los contracargos nos encontramos que son cinco. Para proteger tus ingresos debes prestar atención a cada una de ellas y asegurarte de cumplir con todos los requerimientos.
Existen diferentes tipos de contracargos. A continuación te presentaremos cada uno de ellos. Es importante conocerlos a fin de saber la manera de actuar en cada caso.
Este tipo de fraude ocurre cuando la compra es realizada con una tarjeta de crédito robada. También puede pasar que los datos hayan sido sustraídos y se realicen adquisiciones sin el conocimiento del titular.
Cuando el cliente legítimo detecta la compra presenta una disputa y se inicia el proceso de contracargo. Por lo general, resulta que el comercio pierde el importe de la transacción.
Este tipo de devoluciones de cargos ocurre cuando el cliente inicia un reclamo ante el banco. La intención es quedarse con un producto sin pagarlo. Existen varios tipos:
Las devoluciones de cargos pueden impactar a tu empresas y no solo en términos financieros. Por un lado, está la pérdida de ingresos. Por el otro, está tu reputación que se puede ver comprometida por la acción de los estafadores.
Por ello, es importante que te protejas, en especial cuando lo que ofreces son servicios o intangibles. Ya que en esos casos las disputas pueden ser más complejas.
Las disputas por servicio al cliente se generan cuando la reclamación se produce sobre un intangible. Por ejemplo, cuando una persona reserva en un hotel. En este caso, cuando la cancelación no se hace a tiempo igual se cobra la reserva.
En ocasiones, la disputa se produce cuando el cliente ya disfrutó del servicio y, pese a ello, solicita una devolución. En estos casos, el comercio debe documentar muy bien sus cargos, a fin de protegerse.
Para evitar una devolución del cargo debes presentar los recaudos que demuestren que la operación se realizó de forma correcta. Sin embargo, el tiempo es crítico: para iniciar una disputa solo cuentas con 30 días después de la liquidación.
Debes estar muy alerta a estos plazos. Ya que una vez que vence el lapso perderás el dinero de la venta. Y no podrás hacer una reclamación.
El problema con los fraudes digitales es que son complejos de detectar. Para conseguirlo se debe tener acceso a información actualizada de tarjetas robadas, información comprometida y prácticas de compras de los clientes.
Y, aunque se tuviera acceso a ella, revisar y dar respuesta a un cliente dentro de un tiempo razonable es casi imposible. Afortunadamente, los tiempos que corren dan acceso a herramientas digitales que pueden realizar este tipo de operaciones.
Además, los sistemas que ofrecen estos servicios suelen estar conectados entre sí. De manera que los clientes se ven beneficiados cuando la detección se hace de forma digital y con inteligencia de datos. Entonces, pueden realizar sus transacciones con tranquilidad.
Los débitos de cargos por servicios ya realizados son un riesgo para cualquier empresa. En consecuencia, es fundamental que protejas tus operaciones. No obstante, uno de los problemas al hacerlo es cómo discriminar entre transacciones legítimas de las que no lo son.
Afortunadamente, la tecnología viene al rescate. La inteligencia artificial y la machine learning son grandes aliados para poder detectar las operaciones fraudulentas.
En consecuencia, te permiten, en menos de un parpadeo, evaluar las transacciones, así protegen a tu negocio. Contar con este tipo de servicio digital es una excelente inversión para tu empresa.
En Bayonet hemos hecho nuestra misión ayudarte a prevenir los contracargos y a proteger a tu empresa con la mejor tecnología antifraudes. Por ello, te contamos lo que distingue nuestro servicio.
Cuando el cliente pulsa el botón de pagar realizamos el análisis. Nuestro proceso dura menos que un parpadeo, en ese momento mediante arquitectura de Big Data se estudia la operación.
Nuestro sistema evalúa la operación indicando si aceptarla, negarla o revisarla. Esto se realiza comparándola con una gran cantidad de datos y estableciendo su nivel de riesgo. El resultado es expresado en términos comunes, a fin de que sea comprensible y fácilmente comunicable.
Latinoamérica es una región con grandes riesgos en relación con el fraude. Somos una empresa mexicana que comprendemos las condiciones de la zona. Además, contamos con las herramientas para actuar con rapidez y diligencia. Así evitas los riesgos de devoluciones de cargos malintencionadas.
La prevención de los contracargos es una tarea crítica para el bienestar financiero de la empresa. Por ello, es fundamental que cuentes con un servicio antifraudes que te ayude en este desafío.
Si quieres protegerte de devoluciones de cargos cuentas con nosotros. En Bayonet ponemos a tu disposición una herramienta que se ajusta a tu empresa. Además, podemos detectar tanto el fraude criminal como el no reconocido.
Visita nuestro sitio web y solicita una demostración sin costo. Así podrás escalar tu negocio al tiempo que te proteges de defraudadores. La solución está a la distancia de un click.
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